Fausto Catini, un gimnasta de Elite y selección argentina
Mucha pasión, un gran talento y la necesaria constancia de horas y horas entrenando lo pusieron en lo más alto del país. Con apenas 11 años y un enorme futuro, Fausto Catini, representante de la Escuela Patagonia de gimnasia artística, superó el exigente evaluativo nacional realizado hace pocos días en el Cenard y subió al nivel Elite, el más alto del país. Es el primer roquense en alcanzar este logro y con ello integrará diferentes desafíos con la camiseta celeste y blanca, la del seleccionado nacional.
Fausto, que suma muchas horas diarias de trabajo en el gimnasio Patagonia de calle Tres Arroyos de esta ciudad, comenzó en este deporte antes de cumplir cuatro años y se enamoró de los aparatos y de todo lo relacionado a esta disciplina que ha crecido mucho en la rama masculina en los últimos tiempos en Río Negro.
El joven gimnasta, junto al entrenador Maximiliano Fattori, viajaron con mucha ilusión al Cenard y allí mostraron su gran trabajo. Fausto con todo su talento y Maxi siendo la contención y motivando.
Fueron cuatro días de entrenamiento, con un alto nivel de participantes, y un día de exigencia evaluativa en la que Fausto respondió de maravillas. Sus notas más altas se dieron en la parte física y también sobresalió en técnica.
Ahora queda seguir entrenando y esperar noticias. Hay chances de ser parte de un selectivo que llevará al Sudamericano de Bolivia y en la agenda también aparecen el Nacional de Clubes y el Nacional Federativo. Por lo pronto, Fausto disfruta de un gran noticia y un enorme futuro. Todo logrado con sacrificio y constancia.
Fausto, que suma muchas horas diarias de trabajo en el gimnasio Patagonia de calle Tres Arroyos de esta ciudad, comenzó en este deporte antes de cumplir cuatro años y se enamoró de los aparatos y de todo lo relacionado a esta disciplina que ha crecido mucho en la rama masculina en los últimos tiempos en Río Negro.
El joven gimnasta, junto al entrenador Maximiliano Fattori, viajaron con mucha ilusión al Cenard y allí mostraron su gran trabajo. Fausto con todo su talento y Maxi siendo la contención y motivando.
Fueron cuatro días de entrenamiento, con un alto nivel de participantes, y un día de exigencia evaluativa en la que Fausto respondió de maravillas. Sus notas más altas se dieron en la parte física y también sobresalió en técnica.
Ahora queda seguir entrenando y esperar noticias. Hay chances de ser parte de un selectivo que llevará al Sudamericano de Bolivia y en la agenda también aparecen el Nacional de Clubes y el Nacional Federativo. Por lo pronto, Fausto disfruta de un gran noticia y un enorme futuro. Todo logrado con sacrificio y constancia.